Rocía en dos moldes para muffins de 12 tazas con spray antiadherente. Mezcla el pan rallado, los huevos, la salsa, el chile en polvo, el orégano, la cebolla en polvo y la sal en un tazón grande hasta que todo esté bien combinado. Agrega los frijoles negros y la carne molida y use tus manos para mezclar todo.

Forma la mezcla en 24 albóndigas iguales y luego colócalas en los dos moldes. Usa una mano húmeda para presionar firmemente las albóndigas hacia abajo para que queden planas en la parte superior.

Hornea en un horno a 400˚F durante 20 minutos. Retire del horno y deja que las pastelitos de carne se enfríen durante 5 minutos. Usa un cuchillo para aflojar las albóndigas de la sartén, retíralas con cuidado y sírvelas con crema agria, salsa y queso rallado.

Guarda los pastelitos de carne adicionales en el refrigerador hasta por 3 días y envuélvalos individualmente y congélelos en un recipiente sellado hasta por 3 meses. Para recalentar congelado: coloca en un horno a 350˚F y cocina durante 10 a 12 minutos o hasta que esté completamente caliente o en el microondas durante 3 a 4 minutos en ALTO hasta que esté completamente caliente.