Recorta el exceso de grasa de la carne a tu gusto. Comenzando en el extremo más grueso de cada pieza de carne, haz un corte entre la carne y la piel fibrosa plateada, levantando la grasa y la piel lejos de la carne mientras recortas a lo largo de la tira de carne. (Consejo: Agarra la piel plateada con una toalla de papel para evitar resbalones). Desecha el recorte. Corta la carne transversalmente en trozos de 1 1/2 pulgada (4 cm).

Precalienta la olla de presión eléctrica en la función sear/salteado.

Calienta 1 cucharada (15 ml) de aceite en la olla de presión. Dora la carne en lotes, volteando y agregando el aceite restante según sea necesario, hasta que se dore por todos lados. Transfiere a un plato.

Agregue el ajo, la raíz de jengibre y la mitad de las cebollas verdes a la olla. Cocina, revolviendo, durante 1 a 2 minutos o hasta que comience a ablandarse. Devuelve la carne a la olla con los jugos acumulados. Agrega 1/2 taza (125 ml) de agua, salsa de soja, azúcar, aceite de sésamo y salsa de chile.

Sella la tapa de la olla de presión y asegúrate de que la ventilación esté cerrada. Ajusta la presión a ALTO y establece el tiempo de cocción a 20 minutos. Cuando el temporizador suene, deja que la presión se libere naturalmente durante 10 minutos. Libera rápidamente cualquier presión restante.

Cuela la grasa de la salsa y descártala. Combina la maicena con 4 cucharaditas (20 ml) de agua fría en un tazón pequeño. Pon la olla de presión en la función de sear/salteado; Lleva la salsa a ebullición. Bate lentamente en la mezcla de maicena; Vuelve a hervir. Cocina, revolviendo, durante 1 a 2 minutos o hasta que la salsa esté espesa y brillante.

Sirve sobre arroz cocido y decora con las cebollas verdes restantes.